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Si hay una industria donde las condiciones de seguridad son extremadamente exigentes, esa es la alimentaria. Un sector del que, a raíz de la crisis del Coronavirus, adquiere un mayor protagonismo en cuanto a su importancia y alta exigencia.
“Las condiciones de trabajo de este sector son particulares, ya que en muchos casos hay que mantener unas condiciones de humedad, higiene y temperatura adecuadas para que no se rompa la cadena de frío o los alimentos se mantengan en condiciones óptimas”
Caminar sobre superficies resbaladizas, en un entorno donde la higiene tiene que ser máxima y se está muchas horas de pie. Todos estos condicionantes son determinantes a la hora de seleccionar adecuadamente el calzado de seguridad para el sector agroalimentario.
Características del calzado de seguridad para el sector agroalimentario
1. Comodidad. Para trabajadores con jornadas de trabajo en la que pasan gran parte de su tiempo de pie o desplazándose de un sitio a otro, contar con un calzado cómodo es fundamental. Por eso se recomienda que el zapato sea transpirable tanto exterior como interiormente y que cuente con un extra de comodidad en su interior, como una plantilla que amortigüe la pisada.
Además, y para que esta pisada sea lo más eficaz posible, la suela tiene que ser lo más flexible y ligera posible para facilitar los pasos.
2. Higiene. Si algo exigimos durante la manipulación de los alimentos es higiene para que no haya contaminación en la cadena de producción. Por eso su exterior tiene que contar con una superficie lisa, fácil de limpiar y desinfectar y resistente a aceites, grasas y desechos alimenticios. Además, y para facilitar la limpieza, el exterior tiene que ser preferiblemente blanco, con el fin de detectar con un simple vistazo el estado del calzado.
Una higiene que también se tiene que mantener en el interior, con forros y plantillas que permitan la transpiración para que no se formen bacterias en el interior del calzado de seguridad.
3. Antideslizamiento. En el entorno de la industria alimentaria, es habitual trabajar sobre superficies resbaladizas y húmedas. Para evitar tropezones y caídas durante el trabajo, es imprescindible que el calzado de seguridad cuente con el mayor coeficiente de antideslizamiento en su suela, con canales amplios de evacuación de líquidos y una amplia superficie de la misma.
4. Protección contra impactos. Otro de los accidentes de trabajo recurrentes en esta industria son las caídas e impactos de objetos sobre los pies, que pueden provocar heridas e incluso roturas. Para prevenir estos accidentes, el calzado de seguridad deberá ir reforzado, especialmente en la zona de la puntera.
Línea FOOD de Mendi, el calzado de seguridad que cumple con los 4 requisitos
Especialmente diseñada para empresas conserveras, fábricas de embutidos y el sector cárnico, los modelos de Food cumplen con todos los requisitos que la industria alimentaria requiere de un calzado de seguridad.
Son 4 modelos, disponibles desde la talla 36 a la 46, con formas que se adaptan a todas las necesidades, como botas de media caña, zapatos o botines.
En la búsqueda de la higiene máxima, todos los modelos están fabricados con una microfibra muy elástica e impermeable ante productos y elementos externos. La ligereza de este material aporta un extra de comodidad durante la jornada de trabajo y asegura la correcta transpiración del pie. Al contrario que la piel, al ser el exterior de un material sintético, facilita el lavado y desinfección del zapato sin que la microfibra se vea afectada.
Todos los modelos cuentan en su interior con un forro textil transpirable foamizado y una plantilla termoconformada que aporta un extra de confort durante la pisada.
Su suela, diseñada internamente en Mendi, supera en un 55% las exigencias de la normativa europea de antideslizamiento, gracias a la especial configuración de sus canales para evacuación de líquidos y su flexibilidad. Además, resiste perfectamente las abrasiones y el contacto con productos químicos y aísla del frío y del calor para mantener la correcta temperatura del pie.
Con Food de Mendi, todas las necesidades de la industria alimentaria en una sola línea.